Ana Naranjo pertenece a una de esas sagas cacereñas en las que la música ha estado siempre presente. Hace un tiempo que Ana Naranjo dejó de ser Ana Naranjo y se convirtió en Linda Mirada. Linda Mirada es epítome de himnos hedonistas con regusto ochentero. Es pop desenfadado ideal para los domingos por la tarde. ¿No? Por supuesto que no. Detrás de este aparente desenfado se esconde un trabajo laborioso para llegar a la pura esencia pop.
Extracto de Dea, Sancta, Domina. Mujeres en Cantarrana. [Crónicas del Paseo Marítimo]
[SONORA]
[REMIX]